El código tributario del IRS ofrece ventajas a los contribuyentes de cierta edad.
Publicado por: AARP
Si tienes 50 años o más, existe un beneficio por alcanzar ese hito que tal vez no estés aprovechando: exenciones impositivas dirigidas específicamente a personas como tú. Ahora puedes contribuir más que cuando eras más joven a tu cuenta de jubilación individual (IRA) tradicional o cuenta Roth, a tu plan patrocinado por un empleador o a tu cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA). Y también puedes excluir más ingresos del cálculo de tus impuestos.
El Congreso incluyó algunas de estas disposiciones en la ley Economic Growth and Tax Relief Reconciliation Act (ley de reconciliación del crecimiento económico y alivio impositivo), la cual entró en vigor en el 2002, ante la preocupación de que la generación de los baby boomers no había ahorrado lo suficiente para la jubilación. El Congreso incluyó otras disposiciones de ahorros impositivos, como una deducción estándar más alta, en la ley Tax Cut and Jobs Act (ley de empleos y recortes tributarios) del 2017. Si estás atrasado en tus ahorros jubilatorios, la ley impositiva te da una oportunidad de ponerte al día. Y si estás jubilado o próximo a jubilarte, el código tributario te permite pagar algo menos de impuestos. Esa es una combinación que no debes dejar pasar.
Ahorra un 25% el primer año cuando te unes a AARP con opción de renovación automática. Obtén acceso al momento a descuentos, programas, servicios y toda la información que necesitas para mejorar tu calidad de vida.
Contribuye más a tu fondo jubilatorio
Para el 2023, el límite de la contribución de empleados que participan en planes 401(k) y 403(b), la mayoría de los planes 457 de ahorros jubilatorios o el plan de ahorros Thrift Savings Plan del Gobierno federal, que era de $19,500 en el 2021, aumentó a $20,500. Los empleados de 50 años o más pueden contribuir $7,500 adicionales (más de los $6,500 en 2022), por un total de $30,000.
La contribución límite para el año contributivo 2023 es de $6,500 en una cuenta IRA tradicional o Roth. La contribución adicional para ponerse al día es de $1,000, igual que en el 2022. Para el plan de ahorros para empleados con el incentivo de igualación de la contribución (SIMPLE), la contribución adicional es de $3,500, a diferencia de 2022, que era de $3,000.
Muchas personas que aprovechan esta oportunidad. A pesar de que existen disposiciones que permiten que las personas de 55 años o más se pongan al día con contribuciones generosas, solo el 16% de quienes tienen derecho a esta ventaja hacen efectivamente esas contribuciones, según el informe How America Saves 2022, de Vanguard Group.
Al mismo tiempo, datos del National Retirement Risk Index, el índice nacional de riesgo jubilatorio compilado por el Center for Retirement Research de Boston College, indican que la mitad de los hogares en el país no podrán permitirse el estándar de vida actual una vez que dejen de recibir sus cheques regulares de nómina. A junio del 2020, el 50% de los jubilados casados dependían de los pagos del Seguro Social para al menos la mitad de su ingreso; entre las personas solteras, ese porcentaje era del 70%. Para noviembre de 2022, el beneficio jubilatorio promedio del Seguro Social está estimado en tan solo $1,632 al mes.
Las contribuciones jubilatorias que hagas pueden reducir tus impuestos
Además de permitirte una jubilación más cómoda, la contribución a un plan jubilatorio con impuestos diferidos —como una cuenta IRA o un plan 401(k)— también reduce tus ingresos gravables, lo cual, a su vez, reduce tus impuestos sobre el ingreso. Gracias a esa reducción de impuestos, aumentar la contribución no reducirá tanto tu cheque de nómina como podrías pensar. Si ganas $75,000 al año, por ejemplo, una contribución del 5% a tu plan 401(k) pondría $144 en tu cuenta por cada cobro bisemanal. Suponiendo una tasa de impuestos del 25% tu cheque se reduciría solo en $108, según Fidelity Investments.
Las contribuciones a una cuenta IRA tradicional son deducibles de impuestos, siempre y cuando se cumplan las normas del IRS, incluidos los límites de ingresos. Las contribuciones a las cuentas IRA son totalmente deducibles si ni tú ni tu cónyuge están cubiertos por un plan de jubilación en el trabajo. No obstante, la deducción puede limitarse si tú o tu cónyuge están cubiertos por un plan de jubilación en el trabajo y los ingresos superan ciertos límites. Para el 2023, las deducciones para cuentas IRA de personas solteras cubiertas por un plan de jubilación en el trabajo no están permitidas una vez que el ingreso bruto ajustado modificado (MAGI) llega a $83,000; la deducción desaparece para las parejas casadas que presentan una declaración conjunta cuando el MAGI asciende a $136,000.
Las contribuciones jubilatorias hechas a una cuenta Roth IRA o a un plan Roth 401(k) se hacen después de impuestos: no recibes una reducción de impuestos por adelantado por estas contribuciones, pero el dinero que retiras de las cuentas Roth en la jubilación está libre de impuestos. El dinero antes de impuestos de las cuentas IRA y los planes 401(k) tradicionales crece libre de impuestos, pero eventualmente pagarás los impuestos cuando comiences a hacer retiros durante la jubilación.
Clark Randall, un planificador financiero certificado de Financial Enlightenment en Dallas, anima a sus clientes a reconsiderar sus presupuestos para aumentar las contribuciones regulares a sus planes jubilatorios a lo largo de todo el año. “Presupuestar este gasto es igual que cualquier otro. Requiere disciplina y compromiso”.
Todavía estás a tiempo si deseas hacer contribuciones a una cuenta IRA tradicional o Roth para el 2022. La fecha límite es el 18 de abril, el día en que debes presentar tu declaración de impuestos (a menos que solicites una extensión). Pero las contribuciones a los planes 401(k), 403(b), planes de ahorros Thrift Savings Plans y la mayoría de los planes 457 son por año calendario, de modo que en este momento la cantidad que inviertas se destinará al 2023 ypuedes hacer contribuciones hasta fin de año.
Puedes esperar a cumplir los 72 años antes de tomar las distribuciones mínimas requeridas
Hablando de eso, también hay buenas noticias sobre las distribuciones mínimas requeridas; es decir, la cantidad mínima que debes retirar de un plan de jubilación con impuestos diferidos, tal como una cuenta IRA tradicional. (En las Roth IRA no hay distribuciones obligatorias mientras el propietario está vivo).
Según las reglas que entraron en vigor en el 2020, puedes esperar hasta el año en que cumples 72 para comenzar a realizar retiros obligatorios. (Para tu primer retiro obligatorio, puedes esperar hasta el 1 de abril del año siguiente, pero también tendrás que pagar una distribución mínima requerida en diciembre de ese año). Antes, esos retiros comenzaban a la edad de 70 años y medio. Si no necesitas el dinero que estás obligado a retirar, considera donarlo a una organización benéfica. Si donas tu distribución obligatoria a una organización benéfica calificada directamente de tu cuenta de jubilación (hasta $100,000), no tendrás que pagar impuestos sobre la distribución.
No te olvides de la cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA)
Si tu empleador ofrece una cuenta de ahorro para gastos médicos, o HSA, asegúrate de aprovechar al máximo ese beneficio. El IRS te permite deducir de los ingresos brutos las contribuciones que haces a la cuenta de jubilación, incluso si no detallas las deducciones, y las contribuciones que hace tu empleador también están excluidas de tus ingresos brutos. Cualquier ganancia generada está libre de impuestos. Tus distribuciones no se gravan, siempre y cuando las uses para gastos médicos calificados, que son muchos: desde servicios de ambulancia hasta radiografías (en inglés). Además, la cuenta es tuya; puedes llevarla contigo a un nuevo empleo y usar los fondos en la jubilación.
En el 2023, puedes contribuir hasta $3,850 si tienes cobertura para ti, o hasta $7,500 si la cobertura es familiar. La cantidad permitida para ponerte al día es de $1,000 adicionales si cumples 55 años durante el año. Sin embargo, el límite de tu contribución se reduce por cualquier cantidad que haya contribuido tu empleador y que se excluyó de tus ingresos.
La deducción estándar es mayor a los 65 años
La deducción estándar —que reduce tu ingreso imponible y, por ende, tu factura de impuestos— mejora con la edad. En el 2023, al completar los formularios de declaración del impuesto federal sobre la renta para los ingresos laborales del 2022, las parejas casadas recibirán una deducción estándar de $25,900. Para los contribuyentes solteros y las personas casadas que presenten una declaración separada, la deducción estándar aumentará a $12,950.
Si tienes 65 años o más y presentas una declaración como contribuyente soltero, recibirás una deducción estándar adicional de $1,700 para el año fiscal 2022. ¿Estás casado y presentas una declaración conjunta? La deducción estándar adicional es menos por persona si solo uno de los cónyuges tiene 65 años o más: $1,400 por el año fiscal. Si ambos tienen 65 años o más, la deducción estándar adicional es de $2,800. Para los contribuyentes que tienen más de 65 años y son ciegos, la deducción adicional se duplica.
El único inconveniente de la deducción estándar más alta para algunos contribuyentes es que establece un nivel muy alto para las deducciones detalladas. No tiene sentido detallar las deducciones si no son mayores que la deducción estándar. De todos modos, una deducción es una deducción, y obtener una deducción estándar más grande es motivo de alegría.
Una ventaja adicional: si tienes 65 años o más y tu declaración no es complicada, tal vez puedas usar el nuevo formulario simplificado 1040-SR para personas mayores. Tiene letras más grandes para quienes aún presentan sus impuestos en papel, hay lugares donde ingresar información como los beneficios del Seguro Social y las distribuciones jubilatorias, y también incluye una tabla práctica que muestra las deducciones estándar más grandes.